jueves, 26 de marzo de 2009
... y mil y una sonrisas
Cierta vez, alguien me preguntó que por qué yo no pintaba siendo de Ferrol, cuna de muchos y grandes pintores. Yo le contesté que en dibujo hice mis pinitos, cuando era joven, pero que me decanté por las letras, también cuando era joven. Y me dí cuenta que me expresaba mejor escribiendo, que se me entendía mejor, que me sentían más y mejor. Por esa razón aquí sigo, seguiré estando y hasta que el cuerpo aguante. Por cierto el de la foto soy yo en un concurso de pintura, Plaza de Armas de Ferrol, año aproximado 64/65. Pobre iluso, lógicamente no gané pero sí estuve muy bien acompañado. Alguien se acordará de aquel momento, si es así, un beso de mi parte.
Quince años, mi vida en un balcón
en mi esquina me olvido y te quiero.
El balcón, tantos días
tantas horas y allí, tras los siglos
el silencio, el secreto, la sonrisa
las notas a escondidas.
Desde el balcón aquellos días
tu mirada en la mía
enfrente una calle, una esquina
en la esquina, huidiza, mi mirada
hacia ti y contigo.
Hoy al abrigo de los siglos y los días
tu recuerdo me recuerda
unos rostros, tus amigas, mis amigos
los domingos al cine, el cuartel
el tren, su silbido, mi ilusión
tu sonrisa, mi primera sonrisa.
En mis ojos hoy se acumulan
tu mirada, tu recuerdo
y mil y una sonrisas.
Dedicado a Sarô Müngaz Mêderbuz (Lefor, Egipto 1.865)
Francisco Vila. "Quince años", poema.
("Las cárceles del viento", libro de poemas. A Coruña 2004)
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1 comentario:
Hay quien utiliza pintura para expresar lo que siente y hay quien prefiere utilizar las palabras. Tú elegiste esto último y aunque no se lo que hubieras llegado a hacer con los pinceles con las palabras acertaste de lleno.
Un abrazo
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